En la reseña de hoy toca hablar sobre La serpiente de agua, el comic de Tony Sandoval (http://tonysandoval.deviantart.com/).
Mila es una chica que un buen día de verano se encuentra con
Agnès, otra niña de más o menos su edad, mientras se baña en el río lejos del
bullicio de la ciudad. Agnés queda inmediatamente sorprendida, pues no es
habitual que alguien pueda verla… ya que es un fantasma.
Atraído en un primer instante por la poderosa portada de la
obra, un servidor se ha encontrando con un tebeo sorprendente y poco habitual.
Quizás esto se deba en parte a cómo va saltando la obra de un género a otro.
Así, empieza como un relato juvenil, casi podría decirse que con el paso de la
infancia a la adolescencia, sin faltarle travesuras y amistad. Pero de pronto la
historieta se convierte en una de fantasmas, con un alma en pena a quien solo
los niños pueden oír y a quien solo la protagonista puede además ver, eso sí,
sin perder el sabor juvenil antes mencionado, aunque con algunos elementos
sobrecogedores de por medio. Y, finalmente, el autor nos lleva al terreno de la
fantasía épica, pero sin dejar de lado elementos como la infancia y la amistad
o el terror. Y lo mejor de todo es que, aunque al principio desubique al
lector, todos estos géneros consiguen encajar bastante bien y formar un
argumento sólido.
Respecto a los personajes, hay que empezar hablando de las
dos protagonistas: Agnès y Mila. Mientras la primera tiene un carácter que bien
puede definirse como jovial y travieso, la segunda es mucho más seria y
realista, así como, curiosamente, bastante cobarde en cuanto ve cosas que se
salen de lo normal (lo cual no faltará). Lo mejor de estas dos jóvenes es
cómo actúan como pareja, por la naturalidad con la que está llevada su amistad,
y por la forma de complementarse la una a la otra con sus diferentes
personalidades. Sobre las guerreras que aparecen en la portada y sobre los
antagonistas de la historieta… no se puede decir mucho para no desvelar datos
de la trama, salvo que, además del misterio que los rodea, están sujetos a la
interpretación, como buena parte de la trama, con mención especial a la interesante definición que hacen de
la magia en el tebeo. El resto de los personajes, es decir, los simples
mortales, son bastante grises, por ser anodinos y aburridos dentro de las
vivencias del dúo protagónico, con la notable excepción del hermano de Agnès,
por los sentimientos que tiene hacia su desaparecida hermana.
Respecto al dibujo, Tony Sandoval tiene un estilo que entra
rápidamente por los ojos del lector ya antes de abrir la obra. De este se pueden
mentar varios elementos. Uno es el diseño de los personajes, que encajan un
cuerpo grácil y estilizado con grandes cabezas, cuyos rostros son muy expresivos aún contando con ojos pequeños. Otro es la simbiosis entre lo bello y lo
estremecedor: no solo por yuxtaponer hermosas jóvenes con criaturas sombrías
como “los perros cadavéricos” o “los Señores” (muy siniestros ambos), sino por transformar
unas y otras, como con las escenas de las encías de Agnès y el pulpo negro, sin
tener miedo a plasmar escenas sangrientas y brutales. También hay que mencionar
el precioso uso de las acuarelas de Sandoval, que le permite escenificar
distintos tipos de ambientes, sean estos de interiores o exteriores, diurnos o
nocturnos, y reales u oníricos, prestándosele bastante importancia en a lo
largo de las páginas a lo marino y costero, consiguiendo el ilustrador, según las distintas tonalidades y colores, transmitir optimismo y pesimismo, u opresión y tranquilidad según convenga.
En conclusión, si queréis una historia atípica, emocionante
y que a buen seguro os sorprenderá para bien, dadle una oportunidad a La
serpiente de agua. Podéis haceros con esta obra de Dibbuks por un precio de
18€, incluyendo entre sus 144 páginas, además de la historieta en sí, extras
como bocetos e ilustraciones, incluyendo un homenaje por parte de Gabo
Sandoval.
Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo Tony
Sandoval durante el Expocómic 2015 de Madrid. No se puede dejar sin comentar la siguiente anécdota: a pesar de estar el autor con una grave afonía durante su sesión de
firmas, siempre recibía a los fans con una sonrisa, y si bien casi no podía
hablar, era muy agradecido con sus seguidores. ¡Gracias de nuevo por tu
simpatía!