miércoles, 29 de noviembre de 2017

Red Guns Sketchbook, de Ismael “Thefrisbeeman” Alabado

En la reseña de hoy toca hablar de Red Guns Sketchbook, la libreta de bocetos de Ismael “Thefrisbeeman” Alabado (https://www.thefrisbeeman.com/).


En este tomo el ilustrador nos presenta muy diversos pistoleros. Así, dentro de las páginas del volumen, se pueden ver dos variantes principales. Por un lado, homenajes a famosos tiradores de muy distintos medios, como el cine, el comic o el videojuego; Punisher, Quiet o John Wayne son ejemplos de ello. Por otra parte, el autor también nos ofrece personajes de propia cosecha, y ya sean estos soldados, vaqueros o femme fatales, todos son bastante interesantes  y carismáticos.


Respecto al dibujo, Ismael Alabado sabe dar a sus personajes un aire inconfundiblemente letal. Da igual si estos son más elegantes o brutos, más heroicos, villanescos o ambiguos: lo mortífero está en ellos. Las armas también ayudan a esto último: pistolas, rifles, ametralladoras, etc., ya sean más sobrias o más detalladas, entran rápidamente por la vista. En todos los bocetos el negro es omnipresente, tanto por ser el color con el que el autor sombrea los personajes como para subrayar la oscuridad de las figuras. En todas ellas, además, hay un buen ejercicio de expresiones faciales. Y como muestra de ello, Frank Castle, que lo mismo sale adusto, que siniestro o sereno. Algo similar ocurre con el vestuario: hay un amplio repertorio del mismo, y abarca desde armaduras y uniformes militares hasta prendas de paisano y lencería. Con todo ello se logra, en fin, una miscelánea de tiradores tan variada como visualmente llamativa.


En conclusión, si queréis ver bocetos llenos de multitud armas de fuego con dueños de lo más variado, dadle una oportunidad a Red Guns. Podéis haceros con esta obra de 20 páginas a un precio de 5€ si os encontráis con el autor en algún evento comiquero.

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo el amable Ismael Alabado durante el Heroes Comic Con de Madrid de 2017. ¡Gracias de nuevo!

miércoles, 22 de noviembre de 2017

Testosterona, de Guillermo Jiménez

En la reseña de hoy toca hablar de Testosterona, novela corta de Guillermo Jiménez (https://lecturonauta.wordpress.com/).


Mila Kiwua es una policía de la brigada pilomántica de la isla de Kahu. Tras una jornada de trabajo como cualquier otra, debe volver repentinamente a la acción para salvar a una rehén de unos secuestradores. Durante la operación trabajará por primera vez con Aleksei Pukuipelekawahine, hercúleo agente pelirrojo que la atraerá de inmediato.

Testosterona promete en su sinopsis ser una obra policíaca con elementos de ciencia ficción, erótica y thriller. Para empezar, todo lo que tiene que ver con lo policíaco queda muy bien nivelado, combinando cercanas escenas de confraternización entre agentes en el bar y enfrentamientos contra criminales. Dentro de este último apartado, es de mención obligada la pilomancia, capacidad mágica que permite a su usuario diferentes habilidades según su color de pelo, siendo esta hechicería muy interesante y original.

Respecto a lo erótico, si bien es cierto que es descrito de una forma un tanto tosca e hiperbólica, también hay que decir que sirve para reflejar bastante bien la dinámica entre la racional Mila y el impulsivo Aleksei. Este dúo protagónico aporta a la trama dos puntos de vista de la misma historia, todo ello a través de una estructura novelística muy ingeniosa. La primera parte de la obra es vista desde la perspectiva de Mila, y sus capítulos se llaman “Compañeros”, “Rescate”, “Sexo” y “Testosterona”. A continuación, la segunda parte del libro es narrada desde la óptica de Aleksei, con cuatro capítulos llamados “Testosterona”, “Sexo”, “Rescate” y “Compañeros”. Con todo ello, el autor logra una estructura espejada en varios sentidos genialmente concebida y que permite, además, ver una evolución en la manera de proceder y ser de los personajes principales. De criticar algo en este apartado sería la falta de profundidad de los criminales a los que se enfrentan Mila y Aleksei, pues hubiera estado bien saber más de sus objetivos y motivaciones. Sin embargo, y compensando esto, cabe destacar el importante mensaje antideterminista de la obra, y del que no hablaré mucho para no destriparla a posibles lectores.

En lo referente a la manera de escribir de Guillermo Jiménez, se pueden señalar varias cosas. En primer lugar, el buen ejercicio de condensación que ha hecho al crear Testosterona, yendo al grano por lo general, pero sabiendo cuando detenerse en determinados puntos esenciales. Sin contar algunas más que comprensibles erratas, el mayor despiste que he visto en la pluma del escritor ha sido liarse en algunos párrafos en donde usaba el “usted”, pasando al tuteo de repente para volver a continuación al trato de cortesía. Al margen de esto, la lectura es muy fluida y llana, hasta el punto de que permite al lector finiquitar el libro en una tarde incluso. Y como muestra de lo anterior, pondré dos ejemplos. Por un lado, el de la pilomancia: no se explica su uso, sino que se muestra directamente, lo cual permite hacer los tiroteos más raudos y dinámicos. Por otro, el de la testosterona, con una detallada explicación entre lo químico y psicológico de ella que no solo no afecta al buen ritmo de la narración, sino que además sirve, entre otras cosas, como elemento clave del mundo en que se desarrolla la obra.

En conclusión, si queréis una historia breve, entretenida y con mensaje, dadle una oportunidad a Testosterona. Podéis haceros con esta novela corta de dos maneras. En primer lugar, en versión digital, mediante Kindle y a un precio de 0´99€. En segundo lugar, y mientras dure, en formato físico, con tomitos de 98 páginas por 5€. Tanto para lo uno como para lo otro, os dejo el enlace a continuación: https://www.amazon.es/dp/B06XK28GTJ

Por último, la dedicatoria que me hizo Guillermo Jiménez en el volumen durante el verano de 2017. A modo de curiosidad: no ha sido el único que ha confundido a este filólogo con un historiador. ¡Gracias de nuevo por tu simpatía!

miércoles, 15 de noviembre de 2017

Freaks, de Aitor I. Eraña

En la reseña de hoy toca hablar de Freaks, el tebeo de Aitor I. Eraña (https://twitter.com/aitorierana).


Alba, estudiante de Periodismo, tiene que hacer un trabajo para su carrera: integrarse en un grupo particular y hacer un reportaje de la experiencia. Tras meditarlo, Alba decide infiltrarse entre frikis. En paralelo, y por otra parte, la panda de Dante, Eva, Nikita, PC y Rol se ha dado cuenta de un desfase: son tres chicos y dos chicas, por lo que deben buscar a una elegida que traiga consigo el equilibrio al grupo. Y los hados ayudarán a unos y otros… o no.

Freaks es, ante todo, una obra cómica. Aitor I. Eraña nos presenta en ella desternillantes situaciones de todo pelaje en donde predomina el humor referencial. En él hay multitud de alusiones al cine, al comic, al rol, a la literatura, a la televisión y al videojuego. Con ellas, el autor sabe manejarse muy bien con gran variedad de chistes, desde aquellos que son simpáticos y entrañables homenajes hasta los que tienen una mala uva bestial. Así, lo mismo puede uno encontrarse con que el dentista de Rol es Víctor Von Doom, con Dante queriendo colarse en un cine al modo de Solid Snake o con un Donkey Kong con perversas intenciones hacia la mujer a la que ha secuestrado. Pero Eraña también sabe hacer humor a partir de recursos de su propia cosecha. Y prueba de ello está en los protagonistas de la historieta. Y es que a través de Alba, Dante, Eva, Nikita, PC o Rol (cada uno con su propia e ilustre personalidad), más de un lector podrá sentirse identificado y reconocer situaciones por las que ha pasado: que pongan a caer de un burro delante de uno su serie favorita, batallitas ante el mostrador de una tienda de comics, la lucha contra la abstinencia tabaquera, partidas de rol o de consola que se desmadran, la mala praxis editorial…


Respecto al dibujo, hay que decir que, pese a ser Freaks una de las primeras obras de Aitor I. Eraña, ha envejecido bastante bien. El look cartoon de los personajes no solo es de lo más simpático, sino que, pese a su relativa sencillez, ilustra muy bien la personalidad de cada uno: la truculencia de Eva, la dulzura de Nikita, el hastío del tendero Javi… Las referencias hacen todavía más gracia al verlas ilustradas, sirviendo en algunos casos, además, para saber cuando fueron concebidas las tiras, tal y como con las que aluden a películas como El Retorno del Rey o Los Increíbles.


En conclusión, si queréis pasar un rato tronchante y sois asiduos al mundillo friki, dadle una oportunidad a Freaks. Podéis leer esta obra de dos maneras. La primera, a través de la web del autor, donde podréis ver las tiras originales gratuitamente: http://bloj.net/aitor/freaks.php?date=2006-06-02. La segunda, adquiriendo el tomo en papel, el cual cuesta 9´95€ y contiene entre sus 129 páginas, además de 115 tiras (unas nuevas y otras con un lavado de cara de manos de su creador) comentarios del autor sobre el proceso de creación de cada una de ellas: http://www.nowevolution.net/home/166-freaks.html

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo Aitor I. Eraña durante las Jornadas Comiqueras del Fnac Callao de 2016. ¡Gracias de nuevo por tu simpatía!

miércoles, 8 de noviembre de 2017

El sistema D13: ¡Crítico!, de Joan Tretze

En la reseña de hoy toca hablar de El sistema D13: ¡Crítico!, comic obra de Joan Tretze (http://www.elsistemad13.com/el-autor/).


¡Ah, las duras vicisitudes a las que se enfrenta el máster rolero! Y si no, que se lo digan a Trece, que tiene que hacer frente a las argucias, ocurrencias y salida de tono de los jugadores de sus partidas. Sin embargo, Trece no se dejará mangonear así como así por Paloman, Norma y Detritus y está decidido a contraatacar.

Pese a que esta obra es una secuela del ya reseñado El Sistema D13, el presente volumen tiene como primera virtud que se puede leer independientemente de su predecesor. De este, además, se diferencia en que los temas que trata no son tan dispersos. Así, en el primer comic lo mismo se habla de la historia de los juegos de rol, la evolución de Trece en este mundillo, los primeros encuentros del máster con los que serían sus jugadores habituales y un par de aventuras con ellos. Sin embargo, en este tebeo lo que encontramos, con las notables excepciones de la historia de H&H y una introducción para neófitos, son los constantes tira y afloja de Trece con sus jugadores. Y todo esto se narra de manera muy divertida e ingeniosa, tanto por las triquiñuelas que unos y otros organizan para salirse con la suya, como por la manera de realizarlas. El cariño que le tiene Joan Tretze al rol, por otra parte, es más que patente y notable. Y no solo por la forma de hablar de ciertos juegos, sino también por las situaciones que en ellos se generan, tal y como la dedicación y trabajo duro que conllevan organizar una buena partida.


Respecto al dibujo, sigue en la línea del primero con ciertas mejoras fruto de la práctica, y sigue siendo de un caricaturesco ideal que contribuye en mucho a aportar comicidad a la historieta. Para empezar, gracias a las ilustraciones, las referencias y las reacciones de los personajes se hacen todavía más desternillantes. El apartado gráfico también ayuda en otros lares, tal y como diferenciar al autor de su trasunto, con el primero vistiendo un batín; algo similar pasa con los escenarios, por lo general más minimalistas si son reales y más coloridos si forman parte de los juegos.


En conclusión, si queréis leer una serie de tiras divertidas y con muchas referencias al mundo del rol, no dudéis en darle una oportunidad a El sistema D13. Podéis leer las páginas que integran ¡Crítico! de dos maneras diferentes. Una es acudiendo a la web http://www.elsistemad13.com/ y ojear desde allí las tiras publicadas en 2012 y 2013. La otra manera es comprar el tomo físico, publicado por Ediciones Crónicas de PSN, el cual cuesta 13€ e incluye 80 páginas a todo color.

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo Joan Tretze durante el último Expocómic de Madrid. ¡Gracias de nuevo por tu amabilidad!


miércoles, 1 de noviembre de 2017

Camisa de fuerza, de El Torres y Guillermo Sanna

En la reseña de hoy toca hablar de Camisa de fuerza, el comic que cuenta al guión con El Torres (https://www.facebook.com/El.Torres.72) y al dibujo con Guillermo Sanna (https://www.facebook.com/skoria.sanna).


Alexandra Wagner ha sido ingresada en el psiquiátrico MClaine por asesinar brutalmente a su hermano gemelo, según ella, para luchar contra los monstruos del Otro Lado. El doctor Hayes, nuevo doctor del centro, será el encargado de seguir su caso para tratar de curarla. El trastorno que padece Alexandra ha recibido diversos diagnósticos según los médicos que la han ido tratando, por lo que Hayes tiene ante sí un gran reto. Pero eso no es lo más extraño de su paciente: puede desaparecer del hospital cuando ella lo desea sin que los celadores puedan explicarlo.

Camisa de fuerza es una historieta de terror muy bien concebida. Y no solamente por lograr ser inquietante y desasosegadora, sino por estar muy bien ideada. Tanto es así que hasta prácticamente el final del tebeo el lector no sabe si Alexandra está delirando o está siendo sincera en lo que respecta a luchar contra los seres del Otro Lado. Volviendo al terror, el marco no es lo más perturbador del mismo pese a lo que pudiera parecer, pues la institución mental MClaine no es espeluznante, sino un sitio para brindar ayuda mental. Ese lugar preeminente lo ocupan las visiones de Alexandra sobre el Otro Lado. Para no desvelar mucho sobre lo que uno puede encontrar en las páginas del volumen, me limitaré a señalar que estas tienen cierto sabor lovecraftiano en lo referente a la manera de amenazar a la humanidad y en el nombre de sus principales agentes: “Los que alimentan”.


Los personajes están muy bien caracterizados. Para empezar, Alexandra tiene una personalidad muy particular, combinando cultura y lucidez con un sentido del humor un tanto macabro, a veces yéndose por las ramas, y otras veces siendo directa, según le convenga. El doctor Hayes también es un personaje interesante, combinándose en él un médico deseoso de poder ayudar a los demás y un hombre atormentado por su pasado. La relación de Hayes con Alexandra está muy bien llevada, con una evolución tan viva como fluida tal y como se puede ver a través de los diálogos entre ambos. Fuera de este dúo, entre los secundarios, uno de los más llamativos es Raoul Cimas (si, el cómico español, y pese a la letra de más en el nombre, tiene su mismo rostro), otro paciente del MClaine, tan inesperado e inescrutable como sorprendente. “Los que alimentan”, junto con el misterio de si son reales o no, aportan, además, una amenaza depredadora siniestra y maquiavélica.

Respecto al dibujo, Guillemo Sanna logra con sus trazos ilustrar más que satisfactoriamente este tebeo de terror. La obra goza de un triple coloreado en blanco y negro en su mayoría con señalados momentos expresados mediante el rojo. El ambiente de las páginas es ostensiblemente amenazador aunque en él no aparezca nada fuera de lo común, tal y como si tras cada esquina pudiera surgir cualquier peligro. Sanna también sabe representar las distintas caras de la locura, y particularmente con “Los que alimentan” muestra además unos diseños tan retorcidos y perversos que provocan de inmediato disgusto. A destacar el cambio de peinado de la protagonista tras el ecuador de la obra, mitad melenuda y mitad rapada, por el simbolismo de los dos gemelos Wagner.


En conclusión, si queréis una obra de terror y misterio que os tenga agitados e intrigados hasta la última página, dadle una oportunidad a Camisa de fuerza. Podéis haceros con esta obra de manos de la editorial Dibbuks, incluyendo el comic entre sus 116 páginas, además de la historieta en sí, algunos extras, tal y como un prólogo de Raúl Cimas o las cubiertas originales o alternativas del tebeo en formato grapa.


Por último, la dedicatoria que me hizo Juan Torres en el tomo durante la Feria del Libro de Madrid de 2017. ¡Gracias de nuevo por tu amabilidad!