viernes, 15 de marzo de 2024

Dragones de frontera, de Gregorio Muro Harriet e Iván Gil

En la reseña de hoy toca hablar de Dragones de frontera, tebeo que tiene por guionista a Gregorio Muro Harriet (https://www.facebook.com/profile.php?id=100009406192228) y por dibujante a Iván Gil (https://www.facebook.com/ivan.gilcomic).

 



A finales del siglo XVIII buena parte de América del Norte pertenecía a España. Los nativos, según la tribu, mantenían relaciones amistosas con los españoles, tal y como los hopis, u hostiles, tal y como los apaches. Precisamente estos últimos han hecho una incursión en la zona de Nuevo México en la que, además de robar ganado, han secuestrado a una monja ursulina. Para salvar a la religiosa se lanzan rápidamente al rescate los dragones de cuera, la caballería española fronteriza, sin saber que a esta contienda muy pronto se unirá otro enemigo incluso más terrible que los apaches: los comanches.

 

El western tiene algunos rasgos notorios: el desierto, los indios, lo fronterizo… Ahora bien, pese a que estamos acostumbrados a verlo, bien en la literatura, bien en el cine, siempre desde el punto de vista estadounidense, ya más de un siglo antes los españoles tuvieron que enfrentarse al mismo ambiente hostil, pero con muchos menos recursos y tecnología. Y justo de eso trata el presente comic, siguiendo la senda de las novelas históricas que entremezclan lo realmente verídico y lo ficticio pero verosímil: dentro de lo primero sería las luchas contra los apaches y los comanches, y más concretamente los guerreros de Cuerno Verde, mientras que lo segundo correspondería al rescate de la ursulina. Tanto en un caso como en otro podemos hablar de un buen ejercicio de investigación, tanto en lo histórico con la buena documentación como con lo intrahistórico. Y es que se hace una muy buena descripción de los distintos pueblos indios que entraron en contacto con los hispanos, con cuestiones tales como sus costumbres cotidianas, rituales, su manera de hacer la guerra…    

 



Los personajes que protagonizan todos estos hechos tienen la ventaja de pertenecer a distintos bandos en liza, de tal manera que se pueden ver los acontecimientos desde distintos puntos de vista. Por el lado virreinal tenemos al cadete Miguel, joven, apasionado, enamoradizo e idealista; luego está su superior inmediato, el sargento Beitia, veterano de guerra que es mucho más recio y marcial que su subordinado, de tal manera que hace de buen contraste, aunque sin quedar deshumanizado; también está el teniente coronel Anza, ejemplo de buen gobernador que sabe ser generoso con los buenos e implacable con los malos, así como sor Madeleine, religiosa con una gran capacidad de adaptación, tenacidad y devoción o el soldado Maldonado, figura que se puede definir tranquilamente como la de un canalla. Por el lado apache y comanche, que no deja de ser la parte antagonista de la trama, si bien la obra no se corta en describir la violencia y crueldad de estas tribus, también se les señalan valores como la astucia y la valentía, teniendo a bien la obra también mostrar otras tribus con las que sí que se podía convivir en armonía, cuando no directamente indios integrados completamente en la sociedad española.

 



Respecto al dibujo, Iván Gil crea unas páginas llenas de regusto clásico, es decir, tanto de viejos tebeos de vaqueros como de las grandes cintas de western. Así, las escenas en los desiertos y montes americanos producen lo mismo calor que la sensación de que los protagonistas pueden ser emboscados en cualquier momento; los personajes tienen rostros y cuerpos bastante realistas, muchas veces imperfectos, bien por la dentadura (algo muy realista dada la época), bien por las cicatrices, pero que muchas veces se hacen entrañables o que incluso hacen su peligrosidad más patente. Detalles de la vestimenta, como el difícil mantenimiento de la uniformidad en la caballería presidial o del armamento, con flechazos o lanzadas que provocan gran desagrado al poder notarse el arma por debajo de la piel cuando penetran sus armas en el contrario, también dan buena nota al apartado gráfico. Mención también merece el precioso coloreado de Garluk Aguirre y que hace del libro entre más por los ojos si cabe.

 



En conclusión, si os gustan los westerns que combinan lo épico y realista y la historia de España, dadle una oportunidad a Dragones de frontera. Podéis haceros con esta obra de Harriet Ediciones por un precio de 26€, incluyendo entre sus 120 páginas, además de la historieta en sí, el proceso de creación y documentación de la misma.

 

Por último, la dedicatoria que me hizo el amable Iván Gil en el tomo durante el Festival de Cómic Europeo de Úbeda de 2023. ¡Gracias de nuevo!




lunes, 4 de marzo de 2024

Crónica del Salón del Cómic de Valencia de 2024

Un poquito antes del confinamiento de 2020 tuve la suerte se asistir al Salón del Cómic de Valencia de ese mismo año. Huelga decir que el evento dejo en mi mente más que grato recuerdo, así que cuando comprobé que tenía una nueva oportunidad de volver a esta cita levantina, no lo dudé mucho.

 



Una vez llegado a la Feria de Valencia el sábado 2 sobre las 10:45 pude comprobar que ya había una buena cola esperando a que se abrieran las puertas para pasar un día de lo más divertido con familiares, amigos y todo tipo de actividades. Hechas las fotos de rigor, me metí en el foro norte y me hice con mi pase de prensa (gracias a la organización por concedérmelo otro año).

 



Entre que la gente iba pasando al pabellón y daba vida al encuentro, un servidor empezó a callejear por el artist alley o callejón de artistas. Constaba este de dos pasillos con puestos a ambos lados con creadores que iban desde dibujantes hasta escultores. Varios comentarios en este ambiente: cada vez hay más contenido relacionado con el rol, tal y como con dados artesanos, pantallas de dirección, miniaturas de los personajes o vestimenta para rol en vivo, sin ser esto malo per se, sino al contrario. Por otra parte, aunque parece que los tiempos nos llevan a lo opuesto, se echan de menos no solo más fanzines, sino un mayor contenido original entre los jóvenes artistas: es normal hacer postales, láminas, posters y llaveros de personajes de otros autores (por gustarle a uno y por vender bastante entre los fans), pero se echan en falta más creaciones propias, tanto en formato lector como de otros tipos.

 




Deambulando, me acabé topando con la mesa de Drawill, el cual muy amablemente me dedicó el número 18 de Planeta Manga, así como este encantador dibujo del protagonista de El cartero mientras charlábamos sobre la nueva obra en la que anda trabajando en estos momentos.

 



No mucho después seguirían los pasos de Drawill otros dos autores como son Roger Bonet y Jesús C. Gan, de tal manera que del uno cayeron los números del 2 al 5 de de Freelancers y del otro el tercer número de Dread Cómics, comentando ambos detalles del proceso de creación de sus respectivos tomos.

 



A estas alturas ya el foro norte estaba bastante lleno, aunque afortunadamente sin necesidad de tener que abrirse paso uno a codazos. Me llenaron los ojos de alegría la cantidad de familias que iban con sus niños de puesto en puesto, ya que es muy bonito ver como una afición tan bella como los tebeos pasa así de generación en generación.

 



A continuación, tocaría visitar a Jordi Bayarri en el Anillo de Sirio para hacerme con el décimo número de Entre tinieblas, siendo siempre un placer contemplar a padres e hijos hacerse con sus biografías de la colección de Científicos. Muy cerca de allí estaban también dedicando Dani Bermúdez y Fidel de Tovar en el puesto de Fnac, así que regateando a la larguísima cola de Laia López en Escola Joso, llegué hasta el dúo. Y, tras una muy animada conversación sobre videojuegos de terror (y la locura que es su Perfeddion), conseguí también su dedicatoria en el tomo 18 de Planeta Manga.

 


Por pura suerte, mientras iba hacia Fandogamia, reparé en que Cascaborra tenía una zona en el festival, así como autores dedicando, por lo que tocaba un alto en el camino: me dedicaban así sus obras dedicadas a Orellana y a Oñate sus dibujantes, Sergio García y J. E. Pérez, mientras platicábamos de la historia española en América y de los conquistadores.



Ahora sí que sí, llegado a Fandogamia, además de pasar un rato hablando con sus dicharacheros editores, me vi cara a cara por primera vez con Enkaru mientras me dedicaba su Demon Quest y por tercera vez con Manuel Álvarez mientras este hacía lo propio con Persona normal.  

 


Antes de hacer un pertinente descanso para comer, de la misma manera que obtuve el primer número de Humor imbécil dedicado por Daniel Torrado, comprobé el alto nivel de cosplay que había entre buen número de los asistentes al Salón. Entre el público adulto, destacaban aquellos que iban caracterizados de los personajes de Hazbin Hotel, mientras que los más peques tenían preferencia por los superhéroes de Marvel, aunque había de todo, como en botica.

 


Tras la comida, tocó charla: una muy interesante dedicada al recientemente fallecido Francisco Ibáñez de manos de Jordi Canyissà con, entre otros temas, la evolución de Mortadelo y Filemón, la constante lucha por los derechos de los mismos o su obra póstuma, que debería llegar al mercado en abril.

 


Dando una segunda vuelta por el recinto, uno podía encontrarse con todo tipo de entretenimiento visual. Algunos ejemplos de ello: las exposiciones dedicada a las obras de autores invitados, tal y como Daniel Nsue o la de Paco Roca que recogía piezas desde su infancia hasta el día de hoy, siendo de lo más interesante ver año a año la evolución de este artista.

 




También destacable fue la aparición de un robot teledirigido hecho a imagen y semejanza de Garada K7, la bestia mecánica de Mazinger Z, cuyos movimientos dejaban hipnotizados por igual a grandes y pequeños.  

 


A eso de las 17:30 me tocó el turno para que los hermanos Valderrama me dedicasen el segundo tomo de Gigantes, siendo la espera muy amenizada por la animada charla que mantuve en la fila con Pedro Manuel Ruiz Lázaro.

 


No muy lejos de allí quedaba la tienda de Bangarang, donde comencé la cola para Julia Cejas, la cual llegó con puntualidad a las 18:00 y me dedicó su Hanami mientras hablábamos de salones comiqueros y de su obra Hanan y Genji.

 


Cuando ya estaba a punto de retirarme del evento, vi por el rabillo del ojo que estaba dedicando Jandro González dos obras suyas: una que ya me había llamado la atención en el pasado, La vampira de Barcelona, y otra que recogía otro caso tan real como tremebundo, El misterio del paso Diátlov. Así que tras hacerme con ellas me las dedicó mientras hablábamos de misterios y detectives españoles.

 


Y… ese fue mi paso por el Salón del Cómic de Valencia este año, festival que lo está haciendo muy bien y en el que se pueden pasar muchas horas dedicadas al entretenimiento y la cultura a partes iguales. Y es que, además de lo ya dicho, hubo muchas actividades a las que no asistió un servidor, tal y como charlas, talleres, partidas introductorias de distintos juegos de mesa… por lo que hay ocio para todos los gustos y edades. No faltaron tampoco puestos de comida para no tener que abandonar el recinto ferial y poder estar allí en sesión continuada, cosa también de agradecer. Así que, concluyendo, se puede decir que este evento no solo es muy recomendable, sino que futuriblemente es de prever que vuelva al mismo para ver cómo sigue evolucionando a más y más.


lunes, 26 de febrero de 2024

Decimosegundo aniversario del blog

Pues… ya van doce añitos. Y con nuevo libro de un servidor en el mercado, lo cual no es poco motivo de alegría.

 

Con esta entrada llegamos ya a las 354.166 visitas, de tal manera que si tenemos en cuenta que hace un año se alcanzaron las 334.176, estos doce meses las reseñas del blog han tenido unas 19.990, lo que sigue estando muy bien. De momento no consigo recuperar el viejo ritmo de una entrada por semana (cosas del trabajo, que se le va a hacer), pero he conseguido aumentar las 30 entradas del año pasado en 34 en el que acaba de terminar, por lo que no está tan mal la cosa.

 

Las entradas más vistas de las publicadas el presente año son las que siguen:

5. Villanueva: Obra de terror rural a la española, ideal para aquellos que les guste lo tremebundo y oscuro.

4. Planeta Manga números del 14 al 17: El proyecto de Planeta de hacer una publicación periódica sigue potente con 22 números en su haber, con historietas para todos los gustos y una buena cantera de autores entre sus filas.   

3. 4ª temporada de El Taller: Una vez más ESDIP pone ante nuestros ojos un catálogo de historias cortas muy prometedor salidas de los lápices de autores jóvenes que bien pueden darnos una agradable sorpresa en los años venideros.

2. La mirada hueca: aventura suelta para los que gusten de jugar a La llamada de Cthulhu, pero muy entretenida y que puede alcanzar más de una sesión si los investigadores saben jugar bien sus cartas.  

1. La frecuencia Bauman: fantástica campaña lovecraftiana que hará las delicias de los directores y jugadores aficionados a la investigación y al horror cósmico, prácticamente de obligada compra para los que juegan a Ratas en las paredes.

 

Visto lo visto, el rol gusta bastante por aquí, así que, para futuras entradas, caerán más reseñas roleras patrias.

 

¡Muchas gracias por leerme y a por otro año que vamos!

sábado, 24 de febrero de 2024

Efemérides ilustradas de España, de Irina Hirondelle

En la reseña de hoy toca hablar de Efemérides ilustradas de España, libro de Irina Hirondelle (https://twitter.com/IrinaHirondelle).

 


España cuenta tanto con una historia como unas leyendas (e incluso una mezcla de ambas) sumamente rica y diversa. Pues bien, Irina Hirondelle recoge 35 sucesos más o menos reales de distintos puntos de la geografía española y los relata a su particular manera, de tal manera que cada efeméride va acompañada de un dibujo para ilustrarla.

 

Ninguno de los relatos ocupa más de una página, así que ya se puede anunciar por parte de la autora una buena capacidad de síntesis. Por otra parte, cada historia está muy bien narrada, de tal manera que las más entrañables se hacen más simpáticas todavía (tal y como con La primera taza de chocolate de Europa) y en las más duras no se oculta lo malo, pero tampoco se cae en mostrar o ahondar en las partes más crueles (tal y como al hablar de los agotes). El abanico de temas tratados es bastante amplio: pasajes de la vida de monarcas españoles, biografías criminales, misterios todavía sin resolver, anécdotas bélicas lo mismo sobre valor que sobre astucia, amores y desamores… Un conjunto, en definitiva, muy amplio y en el que todo lector puede encontrarse con capítulos de su gusto.

 


Respecto al dibujo, Irina Hirondelle tiene un estilo marcadamente propio, de tal manera que su obra es rápidamente reconocible: mujeres de narices afiladas, tatuajes geométricos y simétricos, pendientes vistosos… Las ilustraciones son tan ambivalentes como las historias que se narran en el volumen, de tal manera que lo mismo hay besos y abrazos afectuosos que figuras dignas de pesadilla o enfrentamientos con mucho de épica. En el coloreado destaca el uso de los tonos sepias, a menudo complementados por uno o dos colores que destacan y contrastan con los ya referidos ocres.     

 


En conclusión, si queréis conocer más sobre España, tanto por medio textos entretenidos y divulgativos como con buenas ilustraciones, dadle una oportunidad a Efemérides ilustradas de España. Podéis haceros con este libro por un precio de 21,85€, incluyendo entre sus 100 páginas, además de lo ya comentado, varios bocetos sobre la creación de estampa.

 

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo la amable Irina Hirondelle durante el Festival de Cómic Europeo de Úbeda de 2023. ¡Gracias de nuevo!


lunes, 19 de febrero de 2024

Love love love, de Kid Toussaint y Andrés Garrido

En la reseña de hoy toca hablar de Love love love, el tebeo que tiene por guionista a Kid Toussaint (https://twitter.com/KidToussaint) y por dibujante a Andrés Garrido (https://twitter.com/andreslaoveja).

 



En el futuro, humanos y androides conviven en la Isla de Francia, siendo estos últimos ciudadanos de segunda que, a cada día que pasa, están en peores circunstancias. En este contexto se conocerán dos individuos en el metro por casualidad: Karel Rossum, un meca especializado en consolar a las personas, y Elle Van Eden, una joven a la que acaban de echar de su trabajo de camarera. ¿Congeniarán ambos y romperán la mala racha que tienen con el amor a medida que la situación social degenera más y más?

 

Love love love funciona muy bien a tres niveles distintos: como historia de amor, como historia de ciencia ficción y como miscelánea. Como historia de amor, la relación entre Karel y Elle se va cocinando a fuego lento: se conocen en un principio de pura casualidad, luego empiezan a estar muy acaramelados, se van cogiendo genuino cariño y la cosa acaba por pasar a mayores… Muy buena evolución y desarrollo de esta relación, incluso pasando por baches en el camino y por el caos que impregna al mundo de ambos. Respecto a este mundo futurista, como buena obra de ciencia ficción, el presente tebeo aprovecha para criticar y prevenir sobre distintas problemáticas, bien sean estas futuribles, bien sean actuales. De las futuribles: ¿cómo lidiaríamos con inteligencias artificiales avanzadas o comparables a las humanas? ¿las trataríamos como iguales o las despreciaríamos? En lo que se refiere a problemas actuales: situaciones de desigualdad, relaciones tóxicas, obsolescencia programada, represión, violentas figuras entre mesiánicas y revolucionarias, explotación laboral, políticos aprovechados… hay para dar y tomar, casi sin dejar títere con cabeza. En lo referente a miscelánea: Toussaint toca muchos palos y lo hace bien, de tal manera que complementa bastante bien todo lo anteriormente mencionado, tal y como humor con chascarrillos que dan de vez en cuando y que ayudan a rebajar el nivel de tensión y seriedad del ambiente, o elementos de thriller, tal y como con unos misteriosos asesinatos que ocurren muy cerca de los protagonistas… y no digo más.

 



Respecto al dibujo, lo primero que hay que señalar es la gran evolución que ha tenido Andrés Garrido , pues a lo bueno ya visto en obras como Iron Shoes o su Inktober, se le añade ahora la veteranía y la mejora o perfeccionamiento que dan los años de práctica. Por solo citar un puñado de las muchas cosas buenas que tiene el apartado gráfico de este tebeo: la apariencia de los personajes, particularmente los robóticos, por su gran multitud de diseños; el aura entrañable y candorosa de la pareja protagonista en la mayoría de sus interacciones; la capacidad de cambiar de registro, para saltar de una viñeta tierna a una de violencia callejera; ambivalencia que permite lo mismo plasmar una ciudad sobrepoblada (guetos incluidos) que una bucólica estampa rural…

 



En conclusión, si os gustan las obras de temática amorosa, así como las de ciencia ficción con miga, dadle una oportunidad a Love love love. Podéis haceros con este comic de Nuevo Nueve por un precio de 25€, incluyendo dentro de sus 176 páginas un recopilatorio con los tres tomos que dan lugar a la historieta.

 

Por último, la dedicatoria que me hizo el amable Andrés Garrido en el tomo durante el Festival del Cómic de Úbeda. ¡Gracias de nuevo!    


miércoles, 7 de febrero de 2024

Lady Enigma, de David Braña y Olga Carmona

En la reseña de hoy toca hablar de Lady Enigma, el tebeo que tiene por guionista a David Braña (https://twitter.com/branyigan) y por dibujante a Olga Carmona Peral. (https://twitter.com/olga_CPeral).

 



Sarah Perkins es una joven médium traumatizada por el extraño suicidio de su padre. Pese a nublar esos recuerdos con el alcohol, también intenta hacer el bien en el mundo, ayudando a su hermano Brian en casos que a Scotland Yard le quedan grandes por su componente esotérico.

 

Las historias de policías siguiendo la pista a criminales son del gusto de no pocos lectores. Si a estas les añadimos, además, el ambiente del Londres victoriano y toques esotéricos, se empieza a formar una mezcla interesante que combina lo clásico con elementos más atípicos. Pero Lady Enigma, además, tiene otras virtudes. Para empezar, su estructura episódica: cada capítulo (salvo en una excepción) supone una investigación distinta, las cuales se hacen cortas en el mejor de los sentidos. También se ve poco a poco a Sarah evolucionar, ganar confianza y enfrentarse a su alcoholismo, de tal manera que hay una buena historia de superación detrás. Los misterios a los que se enfrenta el dúo de hermanos tienen un buen componente sobrenatural con un toque bastante original, pues tocan elementos de la época y le añaden un sabor propio: hipnotismo, muñecas de porcelana, cuadros inquietantes…

 

Respecto al dibujo, Olga Carmona posee un estilo relativamente sencillo, pero correcto. Y lo de “relativamente” debido a que, pese a no complicarse en exceso con los detalles de los rostros de los personajes, sí que se nota trabajo en otros elementos visuales, tal y como unas cuantas veces con los escenarios, ya sean interiores o exteriores, así como con el sombreado o con las prendas de vestir. La secuenciación de una viñeta a otra, por otra parte, es muy orgánica y fluida, redondeando el resultado final un más que bonito coloreado.

 


En conclusión, si os gustan las historias de misterio decimonónico, dadle una oportunidad a Lady Enigma. Podéis haceros con este comic de Cósmica Editorial por un precio de 16€, incluyendo entre sus 150 páginas, algunos extras sobre el proceso de creación de la historieta.

 

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo la amable Olga Carmona Peral durante el Salón del Cómic de Granada de 2021. ¡Gracias de nuevo!     




miércoles, 31 de enero de 2024

Gigantes, de los hermanos Valderrama – Tomo 1

En la reseña de hoy toca hablar de Gigantes, el comic que tiene por guionista a Carlos Valderrama y por dibujante a Miguel Valderrama (https://twitter.com/Valderrama_Mig).

 



Años atrás unos gigantescos y bestiales alienígenas llegaron a la Tierra y desde entonces luchan en la superficie del planeta entre sí por dominación territorial. La humanidad, por su parte, no ha tenido otro remedio que esconderse en el subsuelo, involucionando en lo social: bandas más o menos grandes luchan por los recursos y por sobrevivir un día más. En este contexto, dos amigos buscan su ingreso en una banda de renombre, los Lobosangre, para tener un buen futuro. Para garantizar su entrada, el líder les hace un peligroso encargo: obtener ámbar negro, una peligrosa sustancia que sirve tanto como combustible como de explosivo. Lo peliagudo de la misión radica en que el ámbar se encuentra en la superficie…

 

Las historias distópicas muchas veces se aprovechan de escenarios extremos para mandar un mensaje a los lectores, con una moraleja más o menos patente y en la que se nos previene contra según que líneas políticas o de pensamiento. Gigantes bien puede meterse en este saco, puesto que la búsqueda de ámbar negro va a llevar a los dos protagonistas por caminos muy distintos pese a partir de un mismo punto de salida. Así, mientras Zedo se meterá de lleno en el mundo violento y salvaje de las bandas movido por ambición y venganza, Gogi decidirá ver más allá y buscar una vida más humilde, pacífica y llena, progresando cada uno en su respectivo camino hasta que el choque entre ambos modos de vida acaba irremediablemente por chocar. Verá el lector, en este sentido, una buena evolución de estos dos personajes principales, mostrando muy claramente hasta que punto el ambiente es fundamental para la evolución del individuo. En este último sentido, cabe destacar la figura de Uron, que se convertirá en una suerte de figura paterna para Gogi, con un aire de solemnidad y fraternidad muy lograda.

 

Respecto al dibujo, refleja muy bien el mundo violento, hostil y apocalíptico en donde viven los protagonistas, bien en una ciudad subterránea llena de ocres, rojos y amarillos sucios que saturan los ojos y con gente con muy mala traza… bien en una ciudad como las actuales, blanca y gris por la nieve y los rascacielos, despoblada y tristona, al menos hasta que aparece un monstruo alienígena colosal y el escenario pasa a ser más bélico. Y hablando de los extraterrestres que dan nombre al tebeo: beben mucho de los kaijus japoneses, pero con su seña de identidad propia, con diseños que recuerdan a una amalgama de gorila y tiburón visualmente muy potente; también merecen mención los parásitos que habitan estos titanes y que suponen también su buena dosis de amenaza para los protagonistas. Pudiera parecer, en este sentido, que los humanos puedan quedar eclipsados gráficamente por sus contrapartes monstruosas, pero no es ni mucho menos el caso: sus rostros son tremendamente expresivos a ambos lados del espectro moral, de tal manera que lo tierno y compasivo se amplifica de la misma manera que lo sádico y traicionero.

 



En conclusión, si os gustan las obras distópicas en escenarios postapocalípticos, con kaijus y derroteros de la vida que conducen a caminos muy distintos, dadle una oportunidad al primer tomo de Gigantes, teniendo este la ventaja de poder leerse de manera autoconclusiva. Podéis haceros con esta obra de Astiberri por un precio de 17€, incluyendo entre sus 120 páginas algún extra sobre el proceso de creación de la historieta.

 

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo los amables hermanos Valderrama durante la presentación de la obra en Omega Center. ¡Gracias de nuevo!