En la reseña de hoy voy a hablar sobre Las Crónicas de
Matilda, el tebeo escrito y dibujado conjuntamente por Francisco Molina (http://www.nohaypapel.com/), Alfredo
Murillo (http://www.alfredomurillo.com/index.php/comics/)
y Fadri (http://monos.fadri.org/).
La elfa Matilda y el gato Gatito son unos detectives medievales.
Un calamar gigante les ha pedido que demuestren su inocencia, ya que se le
acusa de haber destruido un barco, manteniendo el molusco que él no tiene nada
que ver con el crimen. Gatito y Matilda se deciden por creerle y se ponen a
investigar el asunto. ¿Quién destruyó realmente el barco?
Con un poco de policíaco y con mucho de humorístico,
se nos presenta una historia llena de giros argumentales muy divertidos, aunque
siempre (más o menos) con el objetivo de los protagonistas claro: descubrir al
culpable del hundimiento del barco. El humor del que se hace gala va desde el
absurdo (el idioma élfico del tebeo es una buena muestra de ello) hasta el
ingenioso, no llegando a ser en ningún momento los chistes desagradables,
aunque en las tiras que hay al final del tomo a modo de extra hay alguna gracia
un poco ordinaria, pero por lo general es bastante amable. Respecto a los
personajes, hay un amplio abanico de ellos, desde la locuela Matilda
(desmitificándose mucho a los elfos por su parte) al calculador Gatito, pasando
por una heterogénea banda de piratas, un leñador que busca venganza y un joven
de flashbacks inconexos, que hacen la narración todavía más rica. Hay algún que
otro gag que hace referencia al mundo de los videojuegos, surgiendo de repente,
y estando muy bien llevado, como al hallar Gatito una denuncia, y en la imagen
siguiente salir pixelado con ella en la mano en alto, y con música de fondo.
Respecto al dibujo, tiene este tomo la curiosidad de que
cada capítulo se encuentra dibujado por un dibujante distinto al del anterior,
alternándose mutuamente Murillo, Fadri y Molina. Si bien cada estilo tiene su
particular matiz, todos casan bastante bien, tanto para contar una trama
humorística (haciendo los chistes todavía más divertidos) como para formar una
unidad cohesionada. El dibujo es en cada una de sus variantes muy simpático,
con unos personajes muy expresivos. Por
diferenciar un poco el de cada uno dibujantes, se podría definir a partir de
cómo dibuja cada cual a Matilda: Alfredo Murillo la ilustra muy feliz, como si
no estuviese investigando un crimen, Fadri como si fuera una lunática en
potencia, particularmente a raíz de su mirada, mientras que Francisco Molina la
representa más tranquila e incluso seria, lo cual hace sus escenas también muy
divertidas por las cosas que dice con gesto solemne.
En conclusión, si queréis pasar un rato divertido y
entretenido, dadle una oportunidad a Las Crónicas de Matilda. Os podéis hacer
con este comic de 46 páginas por un precio de 3’50€, donde además de la
historia en sí, vienen algunos extras, como tiras dedicadas a los mecenas que
permitieron crear el tebeo, ya que este ha podido realizarse a través del crowdfunding
(sistema de donaciones y mecenazgo a cambio de recompensas).
Por último, las firmas que me hicieron en el tomo durante la
presentación de la obra en Atom Comics, hace unos pocos días, Alfredo Murillo,
Fadri y Francisco Molina, así como un dibujo que me dedicaron en una lámina
Alfredo Murillo y Fadri (Francisco Molina también me hizo uno, no vaya a pensar
nadie que es un perezoso, pero este dibujo todavía no debe ver la luz).
¡Gracias de nuevo a los tres por vuestra simpatía!