domingo, 30 de noviembre de 2025

Diego García de Paredes: El Sansón Extremeño, de Gol y Pedro Camello

En la reseña de hoy toca hablar de Diego García de Paredes: El sansón extremeño, tebeo que tiene por guionista a Gol (https://www.facebook.com/miguelgol.gomezandrea) y por dibujante a Pedro Camello (https://www.facebook.com/pedro.camello.5). 



En la época de los Reyes Católicos, menudearon grandes personajes de la historia española. Uno de ellos fue Diego García de Paredes, soldado de una fuerza tan extraordinaria que pronto se ganó entre el resto de soldados el apodo de "el Sansón Extremeño" por su poderío físico. Hombre apasionado y temperamental en todo lo que tocaba a honor y honra, fue testigo e incluso actor importante de un mundo en cambio y encaminado hacia la hegemonía hispánica. Y, pese a que parezcan sus hazañas cosa de mitos antiguos, los lugares, documentos y personajes históricos que lo vieron en acción dicen lo contrario. 


El dúo de Gol y Pedro Camello, durante varios años, ha creado una buena cantidad de obras con trasfondo histórico de lo más disfrutables: la saga Cruz Negra, Berenguela, Phylax... Y con Diego García de Paredes: El sansón extremeño tenemos una nueva de esta temática. Para empezar, se puede decir que la épica es excelente, puesto que los viajes, desafíos y misiones del protagonista son bastante emocionantes. Este, pese a ser algo fanfarrón en ocasiones, es un personaje al que se le coge cariño rápidamente, tanto por el amor que siente hacia su madre y su hermano o la lealtad que profesa a sus superiores. Los distintos episodios de su vida están divididos en tres: juventud en su Trujillo natal, sus periplos militares y sus últimos años de vida desde la óptica de la madurez. La cronología no es ni mucho menos lineal salvo en las primeras y últimas páginas de la historieta, aunque esto no la hace confusa en absoluto, puesto que los saltos temporales hacia atrás o hacia delante no son obstáculo para una lectura de lo más amena y comprensible. El contexto histórico, es ese sentido, está bien transmitido, ya sea con las luchas entre italianos o la guerra contra otomanos o franceses por parte de España; lo mismo puede decirse de la España histórica e intrahistórica, bien con intrigas de la corte o la llegada de Carlos I, bien con cómo vivía el día a día la gente de a pie en el Renacimiento.   


Respecto al dibujo, poco que decir que no se haya dicho de ya de Pedro Camello: estilo que combina lo realista con lo cartoon y que sería delicioso de ver en versión animada, combates espectaculares (y bastante sangrientos y salvajes cuando el ilustrador se lo propone), documentación reseñable, fondos y paisajes que pueden ser muy detallados... Y a todo lo anterior hay que añadir el buen hacer de Lola Aragón como colorista, con estampas diurnas y bucólicas, crepusculares y épicas o nocturnas y reflexivas. 



En conclusión, si os gustan las aventuras de capa y espada y con personajes históricos y épicos, dadle una oportunidad a Diego García de Paredes: El sansón extremeño. Os podéis hacer con este comic de Cascaborra por un precio de 17€, el cual incluye entre sus 72 páginas, además de la historieta en sí, algunos extras, tal y como un epílogo de Alex de la Fuente. 


Por último, la dedicatoria que me hicieron en el tomo los amables Gol y Pedro Camello durante el Toledo Cómic Fest de 2024. ¡Gracias de nuevo!


domingo, 23 de noviembre de 2025

Moribundo, de Fran Mariscal

En la reseña de hoy toca hablar de Moribundo, tebeo cuyo autor es Fran Mariscal (https://www.instagram.com/franmariscalmancilla/). 

 


Egon es un joven y prometedor autor de terror cuya cabeza es un caos: ha pasado por una experiencia traumática que le ha dejado trastocado y despierta confundido y medio desnudo en las calles de Hollow Hill, población en la que en los últimos años se han cometido muchos crímenes de los que la prensa no ha hecho mucho seguimiento. Desorientado y amnésico, Egon será ayudado y curado por la periodista Piedad mientras investiga la única pista que tiene sobre lo qué le ha pasado: una tarjeta con el número de teléfono y el retrato de una joven llamada Liz. Pero el escritor tendrá que ser cuidadoso: sus caninos se alargan cuando se enfada y una sed terrible se ha despertado en él. ¿Es Liz quién le ha hecho esto? ¿Por qué está obsesionado con dar con ella?

 

Buena combinación de thriller, terror, romance tóxico y superación personal, este comic tiene un protagonista que debe rellenar las lagunas de su memoria y descubrir el misterio que yace tras Liz, Hollow Hill y su nueva condición, con una narración en un principio entre lo onírico y lo alucinógeno bajo una luz noir en el primer tercio de la lectura. En el segundo tercio se da un salto narrativo hacia atrás por medio de la analepsis, de tal manera que, al mismo tiempo que Egon, descubrimos como ha llegado a estar en una situación tan calamitosa y, en el último tercio, volvemos al presente y vemos la conclusión de la trama. El vampirismo está bastante presente en el relato, aunque entra realmente en juego en la segunda mitad de la obra y se agradece que en varios aspectos se salga de la norma, así como que sea duro y grotesco tras una primera imagen glamurosa. La relación entre Liz y Egon es clave en la trama y ya los nombres de los capítulos, titulados como las fases del duelo, dice mucho de ella; ellos son los dos personajes principales y, pese a los puntos en común de ambos, lo interesante son las diferencias. Por otra parte, en torno a ellos, circulan algunos secundarios bastante notables, tal y como los padres de Liz o la Parca, por solo citar algunos, que aportan mucho al trasfondo del lírico y siniestro mundo de Moribundo.

 


Respecto al dibujo de Fran Mariscal lo primero que hay que mencionar es la oscuridad de sus viñetas, particularmente de sus fondos: ya sean estos rojizos, pardos, grisáceos o azulados, además de ayudar a transmitir lo sombrío y tristón de la trama, entona bien con los sentimientos que va padeciendo Egon en cada capítulo. Y hablando de Egon: este no solo coincide en nombre con el cazafantasmas, sino que también guarda paralelismos faciales con él. Fuera de este bonito detalle, el apartado gráfico llama la atención por otras curiosidades, tal y como la rotura o quiebre de las calles o líneas que separan entre sí las viñetas cuando algo violento en lo físico, mental o espiritual tiene lugar, con un efecto muy potente y poco habitual de ver. El hecho de imitar códices medievales para ilustrar avisos, visiones o presagios dota de más originalidad todavía al volumen. Dentro de todos los simbolismos que hay, un servidor se queda con la apariencia física de la Muerte, muy justa, tranquila y similar a la descrita por Jorque Manrique.

 


En conclusión, si os gustan las obras tenebrosas, con vampirismo y misterios de por medio, así como las que tratan de superar los traumas del pasado, dadle una oportunidad a Moribundo. Podéis haceros con esta obra de Norma Editorial por un precio de 29,95€, con 230 páginas que tienen como único extra un epílogo del autor titulado ¿Por qué existen los cuentos?  

 

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo el amable Fran Mariscal en su sesión de firmas de Tomos y grapas en noviembre de este mismo 2025. ¡Gracias de nuevo!  


viernes, 31 de octubre de 2025

W0rldtr33, de James Tynion IV y Fernando Blanco – Tomo 1

En la reseña de hoy toca hablar del primer volumen de W0rldtr33, tebeo que tiene por guionista a James Tynion IV (https://www.instagram.com/jamesthefourth) y por dibujante a Fernando Blanco (https://www.instagram.com/fernandoblancocomic). 



Un mal día, un joven mata en unas pocas horas a una sesentena de personas en su vecindario mientras transmite la masacre en directo y asegura que se avecina un nuevo mundo. Lejos de allí, el magnate tecnológico y multimillonario Gabriel Winter, al saber de los crímenes, reconoce en ellos algo que le cambió la vida veinticinco años atrás: la huella de la Undernet, la parte más profunda y siniestra de internet. Es por ello que se reúne con sus amigos de aquel entonces una vez más para enfrentarse nuevamente a algo que creían vencido y sellado para siempre. Pero aquello que habita la Undernet tiene una ventaja con la que no contaba en 1999: el acceso a internet es casi ilimitado en 2024. 


Con ciertas reminiscencias con It de Stephen King (saltos temporales entre varias épocas, grupo protagónico que debe volver a enfrentarse a algo que creía vencido décadas atrás, amenaza diabólica…), la presente lectura aúna muy bien ciencia ficción, terror y thriller, así como pequeñas pinceladas aquí y allá de humor y romance, sin poder faltar de fondo cierta reflexión sobre nuestra relación con internet. Por todo lo dicho, se hacen malabares de manera muy correcta con distintos géneros en primer o segundo plano. La lectura depara unas cuantas sorpresas, tal y como revelaciones sustanciales, muertes tan potentes como inesperadas o la muy arriesgada prolepsis sobre lo que va a pasar 25 años en el futuro tras la reaparición de Undernet. Hay algunos personajes que acaparan los focos en cuanto aparecen en las páginas, tal y como el ya mentado Gabriel, la agente Silk y su compañero o la antagonista, ya sea por los diálogos o carisma en unos casos o por ver cuál va ser su siguiente movimiento; por otro lado, tanto las acciones de los principales como de los secundarios están muy bien hiladas entre sí, de tal manera que la sucesión de sus acciones e interacciones se sienten orgánicas y naturales.    


Respecto al dibujo, Fernando Blanco nos deleita visualmente con personajes de diseños bastante realistas y escenarios predominantemente oscuros o turbios de una manera u otra. Si bien hay personajes con diseños muy agradables en sus facciones, tal y como Silk o el propio Gabriel y sus amigos, lo perturbador también es fácilmente representado por el ilustrador, tal y como con los horrores de la Undernet y los efectos que tiene sobre el mundo físico y las personas; en esto último se lleva la palma la villana, con desnudos para nada placenteros, sino incómodos y que avisan de peligro inminente. El coloreado no se queda atrás y lo mismo puede ser de lo más elegante y sereno que de lo más sucio o chillón, pero siempre al servicio de la trama.



En conclusión, si os gustan las historias de ciencia ficción y terror, dadle una oportunidad a W0rldtr33. Os podéis hacer con esta obra de Norma Editorial de 168 páginas por un precio de 24€.

Por último, la dedicatoria que me hizo en mi tomo el amable Fernando Blanco durante el Salón del Cómic de Zaragoza de 2024. ¡Gracias de nuevo!


domingo, 12 de octubre de 2025

Historia del príncipe Alcaraván, de Juan Alcudia y Miguel B. Barbero

En la reseña de hoy toca hablar Historia del príncipe Alcaraván, tebeo que tiene por guionista a Juan “Elchinodelpelocrespo” Alcudia (https://www.instagram.com/elchinodepelocrespo/) y por dibujante a Miguel M. Barbero (https://www.instagram.com/migamigami/).

 


El rey de Alcaravania está gravemente enfermo y, en paralelo a él, su reino también entra en decadencia y agonía. Pero una tormentosa noche un misterioso embozado le ofrece un tónico para curarle y, para sorpresa del monarca, cura su mal… pero solamente por unas horas. El embozado informa al príncipe Alcaraván, heredero del monarca de que, si quiere un remedio permanente, deberá viajar hasta la tierra de Helivath en un plazo de una semana. Decidido a salvar a su padre, Alcaraván emprende un viaje hacia tierras desconocidas que pueden ser tan maravillosas como peligrosas.

 

Hay historias que tienen buenos finales y otras que los tienen regulares o incluso malos. Hay historias que tienen finales más o menos abiertos y otras que tienen finales cerrados, así como hay historias con finales felices y otras con finales trágicos. Todas ellas, sin embargo, tienen un desenlace. Y aquí radica el problema más gordo de Historia del príncipe Alcaraván: no tiene final ni resuelve los conflictos de la trama. ¿Salva Alcaraván a su padre? ¿Quién es el misterioso embozado y por qué ha hecho lo mismo en otros reinos? ¿Para qué necesita este que el príncipe viaje a Helivath? ¿Y qué hay en Helivath?

Si bien Alcudia en el epílogo del volumen intenta explicar la falta de conclusión en la obra (mal asunto este si ya se preveía un rechazo por parte de los lectores) mientras alude a la par a la inspiración de Industrias y andanzas de Alfanhuí y los simbolismos alquímicos y esotéricos, este texto no quita en absoluto el mal sabor de boca que deja la inconclusión del relato. Es más, pese que hay comentarios interesantes, la sensación que queda al final es de mala excusa.

 


Y es que Historia del príncipe Alcaraván tenía elementos muy buenos para triunfar como tebeo: sus personajes, su misterio y su dibujo. Para empezar, tanto sus personajes principales como secundarios son de lo más diversos; así, si ya al protagonista se le coge cariño por tanto por el amor hacia su padre, su responsabilidad y su inocencia, hay en su camino un gran abanico de secundarios de lo más diverso muy en la tradición de El Principito: otros buscadores de Helivath que o se perdieron o cejaron en su periplo, un arquitecto entre pícaro y solemne, juguetes macarras y resentidos con la humanidad… Y todos ellos tienen tras ellos más chicha de la que parece por la ya mencionada simbología. El misterio sobre el embozado y Helivath, con mucha épica de fondo, junto a la cuestión latente sobre para qué se necesita a distintos herederos reales en esta ubicación, serían otros elementos atrayentes de alcanzarse una conclusión. Y el dibujo de Miguel B. Barbero es una delicia visual que sería idóneo para la animación, con unas ilustraciones a las que casi ves moverse. Ya sea lo mismo con bosques, ciudades modernistas, ruinas o parajes oníricos, todos los escenarios son muy llamativos, con especialmente buen tino para escenas nocturnas. No hay dos personajes iguales, con todos y cada uno de ellos teniendo algo que les identifica y les hace sobresalir con respecto al resto, casi siempre con un toque encantador de un modo u otro.

  


Por todo lo dicho: ¿recomiendo Historia del príncipe Alcaraván a posibles lectores, con sus 110 páginas y sus 25€ de precio con la excelente edición de la editorial Maldragón? Lo haré solamente cuando se haga una conclusión del presente comic, puesto que puedo asegurar que la obra no es que pueda tener una secuela, sino que debe tenerla para que toda esta historia no sea una tomadura de pelo. Y, más importante aún: desvincularse dentro de lo posible todo lo que se pueda del Alfanhuí, por respeto a la negativa de la viuda de Sánchez Ferlosio. Alcudia y Barbero pueden hacerlo, puesto que tienen buenas ocurrencias como se puede ver en ilustraciones extras aquí y allá, y yo sinceramente desearía ver alguna de ellas en una futurible segunda parte.

 

Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo el amable Juan Alcudia durante el Festival de Cómic Europeo de Úbeda de 2025. ¡Gracias de nuevo!


martes, 30 de septiembre de 2025

Krysalis, de Nacho Fernández

En la reseña de hoy toca hablar de Krysalis. Encuentros en la pequeña fase, tebeo obra de Nacho Fernández (https://www.instagram.com/nacho_comic/).

 


Hace poco Dani, un niño fan de la ciencia ficción, entró en contacto con Myrk, una extraterrestre diminuta que le cabe en la palma de la mano. Pero cuando van con la familia del primero a una convención científica todo se sucede y complica: los zark, raza alienígena enemiga de los Nymphs, el pueblo de Myrk, entra en escena y toman prisionero a Dani. Tocará a Ruby y Carla, hermana y hermanastra de Dani, unirse a Myrk y a los otros Nymphs para salvar a este en un peligroso viaje espacial.

 

Nacho Fernández es bastante ducho en lo que a ciencia ficción se refiere, tal y como se ha podido ver en obras como Los mundos de Valken. Ahora bien, frente a la anterior historieta, Krysalis tiene la particularidad de que, pese a que puede ser muy disfrutable para un adulto, su público ideal es el infantil y el adolescente: los personajes principales (además de tener estas edades) son fácilmente empáticos, se presenta un conflicto serio pero sin caer en atrocidades o gore, hay humor y chistes que aligeran la narración… y el asunto de la madre de Carla y el padre de Dani y Ruby, emparejados de nuevo tras sus respectivos divorcios, se trata con mucha mano izquierda y con ambos adultos siendo más que entrañables. Volviendo a la ciencia ficción: si bien hay algún elemento tan fantástico (como clásico) como un rayo reductor, en general los aliens, naves, aparatos o localizaciones son bastante realistas y verosímiles, tal y como con los primeros en los que a asemejarse en insectos en unas cosas o a seres humanos en otras. Los personajes son bastante variados en cuanto a objetivos y personalidades, con algunos planos y otros que evolucionan a lo largo de las páginas del tebeo.

 

Respecto al dibujo, Nacho Fernández presenta un estilo muy parecido al ya visto en Valken, pero menos oscuro y mucho más alegre, tal y como se puede ver en la paleta de colores, mucho más luminosa. Los diseños de los vehículos, armaduras y demás son una delicia visual, especialmente para los que gusten de la entomología; los extraterrestres no se quedan atrás, tal y como con los fawn, los favoritos de un servidor en lo visual, aunque no hay realmente ninguno desagradable a la vista. Cosas a mejorar solo se me ocurren dos: se echan en falta de vez en cuando más fondos y hay algunos personajes fáciles de confundir con sus compañeros de raza. Por otra parte, las expresiones faciales están más que conseguidas, de tal manera que ayudan lo mismo a dar solemnidad o seriedad a algunas escenas, así como lo opuesto también, es decir, reforzar lo cómico de los chistes.

 


En conclusión, si gustáis de la ciencia ficción y si tenéis peques en casa, dadle una oportunidad a Krysalis. Podéis haceros con este comic de Letrablanka por un precio de 12,90€, incluyendo entre sus 60 páginas, además de la historia en sí y a modo de extra, diseños y comentarios sobre la creación del volumen.


Por último, la dedicatoria que me hizo el amable Nacho Fernández en Akira Cómics en septiembre de 2025. ¡Gracias de nuevo!


domingo, 21 de septiembre de 2025

Espada y pluma, de El Torres y Jorge Esteban Urabayen

En la reseña de hoy toca hablar de Espada y pluma. El capitán Contreras y Lope de Vega, tebeo que tiene por guionista a El Torres (https://www.instagram.com/eltorres/) y por dibujante a Jorge Esteban Urabayen (https://www.instagram.com/jorgiot/).

 


Alonso de Contreras, corsario y soldado de los Tercios de España, vuelve a su Madrid natal en 1625 para esperar un destino y puesto de importancia del marqués de Hinojosa. Entre tanto, se hospedará en la casa de Lope de Vega, de tal manera que el combatiente y el dramaturgo pasarán a ser grandes amigos y confidentes al compartir entre sí sus glorias y sus penas.  

 

España siempre ha tenido una historia rica en personajes históricos tanto en lo referente a militares como a literatos. Este es el caso tanto de Alonso de Contreras como de Lope de Vega, escritores y soldados ambos que se llegaron a conocer realmente, hasta el punto de que el segundo le dedicó al primero una de sus tragicomedias, El rey sin reino. Así que, para empezar, ya se puede alabar el planteamiento del tebeo, no solo por su realismo histórico, sino también por su verosimilitud, por la manera en la que se plantea la amistad entre ambos caballeros, primero por lo protocolario y luego por la mutua admiración y empatía que se gesta entre ambos. Las conversaciones de ambos son una delicia de leer, ya que además de distintas reflexiones vitales, Contreras narra a Lope muchas de sus peripecias, sacadas directamente de su Discurso de mi vida. En este punto puede decirse que le comic funciona igual de bien para lectores que conozcan a los dos protagonistas como para los que no: a los segundos buenamente puede picarles la curiosidad por saber quiénes fueron ambos e indagar más, con una más que buena introducción al Siglo de Oro, con sus guerras, duelos, grandeza teatral, gloria y miseria, rivalidades entre literatos… Sobre esto último, muy bien expuesta la rivalidad entre Cervantes y Lope, así como las reflexiones del segundo sobre el primero y, por supuesto, la inquina entre Góngora y Quevedo, más que bien explicada con la pequeña pero intensa aparición de ambos poetas a modo de grandes secundarios.

 

Respecto al dibujo, Jorge Esteban Urbayen lleva al papel un estilo que encaja plenamente con el Barroco: realista, con predominancia de sombras y negros, reacciones emocionales exageradas… De esta manera, crea grandes viñetas con tertulias tabernarias a la luz de las velas, estampas bélicas y navales en las que choca lo violento con la luz y la belleza mediterránea o rememoración de un pasado en el que lo mismo hay arrepentimiento que añoranza. La labor de documentación es bastante acertada y se nota en detalles como la vestimenta, las armas o la arquitectura, de tal manera que no será raro que algunas páginas recuerden a algún cuadro de Velázquez. Por otra parte, para los rostros de varios personajes se ha escogido caracterizarlos como famosos, tal y como con Lope, al que se le representa homenajeando a Christopher Lee. Cabe destacar el curioso contraste que hay entre la mayor parte de las viñetas, con fondos más o menos elaborados y algunas que tienen directamente fondo en blanco para destacar a los personajes que las protagonizan, tal y como en las que se representan escenas teatrales.

 


En conclusión, si os gustan el Barroco, las obras crepusculares y de capa y espada, no dudéis en darle una oportunidad a Espada y pluma. El capitán Contreras y Lope de Vega. Podéis haceros con esta obra de Cascaborra de 68 páginas por un precio de 17€, la cual incluye, además de la historieta en sí, a modo de extra, diseños y textos sobre la creación del volumen.

 

Por último, la dedicatoria que me hicieron en el tomo los amables El Torres y Jorge Esteban Urabayen durante el Salón del Cómic de Valencia de 2025. ¡Gracias de nuevo!


domingo, 31 de agosto de 2025

Tres terceras partes

Toca nuevamente hablar de secuelas de obras ya reseñadas con anterioridad en el blog y, más concretamente, de tres terceras partes.

 



En El linaje perdido, de T. F. Famux, la guerra civil en el Reino se propaga, de tal manera que la principal zona de combates es la frontera entre los Cublión y los Amoyda. Pero la reaparición de Taisham Aivanek para secuestrar a su hermano, el rey Maltés, podría cambiar todo el tablero geopolítico del conflicto, igual que ha pasado con el rapto de la princesa Liséa para casarla con Armiat, el joven pretendiente que aspita a ocupar el trono. ¿Hacia que lado se inclinará la balanza?

Nuevamente el lector asiste a intrigas y maquinaciones políticas a la par que a enfrentamientos bélicos, con buen desempeño de Famux en ambos terrenos, así como en la frontera que une ambos: el sufrimiento de la gente de a pie en medio de las guerras. Y esto lo hace de manera tan desgarradora como excelente a través de los personajes de Ghada y Samer, adolescente y niño que tienen que sobrevivir de manera penosa en tierras devastadas, en plena huida o entre desprecios de los leales al trono como refugiados de guerra. Taisham sigue su interesante evolución y Maltés sigue aportando muy buenas lecturas al aunar buena intención y lógica en sus actos. De poner un pero es que, salvo el frente principal de la guerra, los otros se tocan muy superficialmente; eso sí, da la sensación en el epílogo del libro (escrito de manera maravillosa en lo que a generar tensión se refiere) que se verá más de esto en el cuarto y último tomo de la saga.

 



En Dragones de frontera. Los cañones de San Carlos, de Gregorio Muro Harriet (https://www.facebook.com/profile.php?id=100009406192228) y Pedro Camello (https://www.instagram.com/pedro.camello/), Azucena y los indios y dragones de cuera con los que ha unido fuerzas sobreviven al tornado que, por otra parte, ha matado a buena parte de las reses que iban a vender a las Trece Colonias. Pero estos tampoco pueden detenerse mucho a lamentar su suerte, puesto que el rescate de Armand, el esposo de Azucena, sigue en curso, de tal manera que sus pasos los llevarán hasta San Luis, en la Luisiana española. Allí la persecución, de una manera u otra, habrá de acabar.

Tras ese final de Azote que dejó a más de uno con ansiedad por saber que ocurría a continuación tras el desastre natural, este western sique su más que entretenido progreso con emboscadas, trampas, cabalgadas por el llano, cruce de ríos en canoa y enfrentamientos con los indios aliados de los ingleses. De poner un pero sería que la batalla de San Luis necesitaría más páginas de desarrollo, ya que, si bien su principio está más que bien, se echa en falta más lucha en los atrincheramientos. Por otra parte, algunos secundarios como el albéitar Miguel, el sargento Beitia o el Joyoso brillan con luz propia y ayudan lo mismo a darle más sabor al relato que a saber más sobre la época. Se mantiene todo lo bueno del dibujo de Pedro Camello ya señalado en la reseña del anterior volumen, sin escatimar detalles cruentos cuando hace falta, ya sea con el sacrificio de caballos, la crueldad india en la guerra, maltratos… aunque sin faltar por otra parte la épica cuando esta es necesaria.

 



En Bella Muerte. La rata, de Kelly Sue Deconnick (https://kellysue.tumblr.com/) y Emma Ríos (https://www.instagram.com/emmartian/), Clara, una de las descendientes de Sarah Fields, ha muerto en extrañas circunstancias. Y Frank, el tío de la fallecida, convoca a Ginny, Segadora de la Venganza, para saber qué ocurrió con su sobrina realmente y darle justicia.

Si en el primer volumen de la historia se surcaba el salvaje oeste y en el segundo las trincheras francesas de la Primera Guerra Mundial, en el tercero asistimos al Hollywood en su edad dorada en una historieta con mucho de noir. Y aquí la grandeza de Bella Muerte: lo bien que saben moverse entre géneros distintos sus dos autoras mientras se valen de Ginny para contar distintas tramas, aunque siempre manteniendo su característico toque onírico, algo tan aplicable a la trama como al dibujo: las sombras chinescas que proyectan las marionetas de papel de Clara, las alucinaciones de la Sed, las trampas espinosas de la Obsesión… Los simbolismos siguen a la orden del día, con la estructura habitual de las anécdotas y metáforas de la mariposa y el conejito del inicio de cada capítulo. La acción no es tan profusa como en los dos anteriores números, de tal manera que este es el más calmado y melancólico en lo que va de serie, aunque también es cierto que nos regala los ojos con algún interrogatorio violento o un clímax bastante épico. Y todo ello con los geniales trazos de Emma Ríos, que según la página lo mismo parece estar dibujando un cuento en el Jardín de la Muerte por medio de sus bellos animales que pesadillas cuando aparecen personajes tan marchitos y desagradables a la vista como Sed.