En la reseña de hoy toca hablar de Crónicas de Mesene, tebeo que tiene por guionista a Roke González y por dibujante a Mateo Guerrero (https://www.facebook.com/mateo.guerrero.3954).
Ragnar y Baram son dos guerreros en busca de un nuevo
trabajo con el que emplearse como guerreros. Para ir tirando competirán en un torneo donde,
además de ganarse unas monedas, llamarán la atención del barón de Morgalad,
elfo oscuro que les propondrá una misión muy bien remunerada: recuperar una
reliquia élfica de una antigua torre. Lo que no saben ni Ragnar ni Baram es que
son peones de una conspiración que puede provocar el caos y la guerra en
Mesene…
Las obras que surgen a partir de partidas de rol muchas
veces tienen un encanto especial. Crónicas de Mesene es uno de estos
casos, con un sabor de historia de aventuras que sabe combinar y nivelar muy
bien la épica con algunos momentos de comedia. La estructura rolera también
está muy bien llevada a las viñetas, con el par de buscavidas al que le ofrecen
una misión aparentemente simple pero que se va a ir complicando por momentos
tanto en cuanto a trasfondo como en realización. El hecho de que el dúo
protagonista destile cariño por parte de los autores también es algo que se
nota, con las personalidades de cada uno en buena sintonía pese a sus
diferencias, con un Ragnar más serio y marcial y un Baran más pícaro e
inquieto. A esta pareja le viene como anillo al dedo la princesa Rowena, puesto
que tiene el hambre de aventuras del uno y el sentido del deber del otro la
convierte en un punto intermedio entre los dos veteranos. No faltan, por otra
parte, muchos elementos del género fantástico: orcos, dragones (estos últimos
muy interesantes), trampas letales, magia, maldiciones, talismanes…
Respecto al dibujo, resulta muy interesante ver el estilo de
Mateo Guerrero hace un cuarto de siglo, con ese toque tan noventero que incluye
a unos personajes estilizados y angulosos; la evolución ha sido notable a lo
largo de los años, de tal manera que cuesta ver aquí la mano más perfeccionada
que yace tras Turo
o El
bosque del tiempo, pero hay algún que otro detalle que ahí está, tal y como
con la complexión de Damrod. A destacar que este tipo de dibujo que ya coqueteaba
con el manga fue muy importante para el mercado español, ya que Guerrero fue el
primer dibujante patrio que empezó a meter influencias japonesas en nuestros
tebeos, de tal manera que se creó un precedente para algo que empezó con poca
aceptación pero que ha ido ganando más y más seguidores tanto entre el público
como entre los dibujantes y críticos.
En conclusión, si os gustan las historias roleras de fantasía
épica, dadle una oportunidad a Crónicas de Mesene, importante punto de
inflexión en el tebeo español. Podéis haceros con su edición 25º aniversario de
manos de Dolmen por un precio de 20€, incluyendo entres sus 144 páginas, además
de los cuatro números recopilados de la historieta original, algunos extras,
tal y como entrevistas a los autores, ilustraciones de los personajes con el
estilo actual de Mateo Guerrero y homenajes por parte de otros autores.
Por último, la dedicatoria que me hizo en el tomo el amable
Mateo Guerrero durante el Festival de Cómic Europeo de Úbeda de 2024. ¡Gracias
de nuevo!