En la reseña de hoy toca hablar de Estrellas errantes, la novela de Gema Bonnín (https://twitter.com/GemaBonnin).
Las gentes de Tásidar han averiguado que en su mismo
sistema estelar hay otro planeta habitado por humanos: Mitsval. Sin embargo,
cuando sus naves llegan a este nuevo mundo, descubren que está mucho menos
avanzado que el suyo en lo tecnológico y en lo social.
Desde este momento, dos posturas políticas se enfrentan, con
partidarios de ambas tanto en un mundo como en otro: los cooperativistas, que
buscan que haya libertad total de movimiento y comercio entre ambos planetas, y
los autonomistas, que buscan que no se interfiera en el progreso y evolución
natural de las gentes de Mitsval.
A consecuencia de esta disputa ideológica, se va a celebrar
una cumbre entre los dos planetas que determinará las futuras relaciones entre
ambos. Sin embargo, dos cruentos atentados tras los que hay mucho más de lo que
parece provocarán una reacción en cadena en la que se verán envueltas
decisivamente tres personas: Rin, la reina del imperio más poderoso de Mistval;
Nikki, una contrabandista que trafica con material tasidariano en suelo
mitsvalense; y Lux, un agente del orden que está sobre la pista de la segunda.
La mejor ciencia ficción no es solo aquella que bien pudiera
ser real o científicamente rigurosa en el futuro, sino aquella que deja al
lector pensativo y meditabundo sobre según qué hechos. Estrellas errantes
cumple con todo lo anterior. Y es que la cuestión de “autonomismo vs
cooperativismo” no es baladí: no solo es una encrucijada perfectamente verosímil y
plausible, sino que Bonnín expone los pros y los contras de ambas posturas de
manera muy acertada: no hay una solución muy buena y otra mala y en ningún
momento se dice al lector cómo pensar, sino que se le invita a reflexionar y a
elucubrar su propia opinión con todos los datos sobre la mesa. Para aquellos
que no están muy versados en la ciencia ficción, además de la anterior e
interesante cuestión filosófica y política, otro punto a favor es que la autora
no abruma a los lectores con tecnicismos, sino que describe de manera muy
cercana y comprensible unas ciencias que no se hacen demasiado lejanas al ser
humano actual.
Pero además de la trama política ya mentada, dentro de esta
obra hay otras dos: una policíaca y otra negra, entrelazadas y confrontadas a
la vez. Si la primera la refleja muy bien el personaje de Palvidia Rin, las
otras dos son desarrolladas por, como ya se ha comentado, Lux Kentaurus y Nikki
Rendix. He aquí otro de los atractivos del presente libro: el buen desarrollo y
evolución del que hacen gala sus tres personajes principales, así como su
realismo, al no ser ni mucho menos perfectos y cometer errores y, por supuesto,
el hecho de que se les coge cariño a lo largo de las páginas de la historia. La
trama criminal empieza con un contrabando más que lógico entre Mitsval y
Tásidar, al beneficiarse de manera ilícita los habitantes del primer mundo con
las manufacturas del segundo… a cambio de pingües beneficios para los
traficantes, jugándose con las líneas que separan lo ilegal de lo inmoral con
bastante habilidad. A todo esto hay que añadir que, si exceptuamos quizás el
principio de la obra, la información y el trasfondo cultural, político y
religioso de los distintos mundos en liza se presenta de manera bien
desarrollada, sin atropellos y sin sobresaturar al lector, con lo que además se
crea una estampa muy rica y diversa a través de paisajes lo mismo medievales
que futuristas, ya sean estos urbanos, rurales o naturales. De poner alguna
pega más, la única que se me ocurre es que hay alguna escena que podría haberse
desarrollado con más emoción en vez de despacharse rápidamente como con el
combate del capítulo cincuenta, pero es la única que se me ocurre: la novela
está muy bien escrita y es bastante adictiva, de tal manera que no es raro
devorar del tirón una decena de sus mesurados y bien sintetizados capítulos. No
se puede dejar sin mencionar el desenlace de la novela, aunque sea por encima y
sin desvelar detalles: no dejará indiferente a nadie.
En conclusión, si os gusta la ciencia ficción o queréis
darle una oportunidad, no dudéis en leer Estrella errantes. Podéis
haceros con esta novela de Nocturna Ediciones por un 16,95€, incluyendo entre
sus 467 páginas, además de la trama en sí, algunos extras, como cada uno de los
tres personajes principales ilustrados por Victoria López de manera tan
atractiva como entrañable. Dejo aquí un enlace a las primeras páginas, cortesía
de Nocturna Ediciones: https://www.nocturnaediciones.com/capitulos/269.pdf
Por último, la dedicatoria que me hizo la amable Gema Bonnín
en el tomo durante la Feria del Libro de Madrid de 2021. ¡Gracias de nuevo!