Hoy toca hablar del Level Up León (o LUL) de 2014,
evento comiquero que se celebró los pasados días 18, 19 y 20 de julio, teniendo
un servidor el placer de asistir el sábado 19.
Lo primero que se ha notado de esta edición ha sido el
cambio de recinto. Debido a que el Espacio Vías se ha quedado pequeño para la
gran cantidad de gente que acudía al evento, este se ha llevado a la Escuela de
Ingenierías e Informática de la Universidad de León. Las ventajas de esto eran
que el recinto era más grande y la gente podía pasear más tranquilamente, así
como ofrecerse un mayor número de actividades. Si bien se podrían haber echado
de menos el ocio al aire libre de las anteriores ediciones, el hecho de que
llovió abundantemente favoreció que todo se hiciera bajo techo.
Abriendo el lugar a las 11:00, nada más entrar y
después de pagar la entrada (solo 3€, siendo esta canjeable por una bebida en
el bar del recinto, un gran detalle del Pacto de Janas, los organizadores del
LUL), se encontraba uno en un bello recinto que consistía en dos anillos, uno
encima del otro, que formaban la planta baja y la planta primera,
respectivamente. En ambos pisos había varias aulas que se usaban para distintas
actividades, ya fueran charlas, talleres, partidas de rol ¡e incluso un
simulador de vuelo! Lo que diferenciaba a un piso de otro eran sus pasillos: en
el bajo estaba la zona comercial y con stands de fanzines, mientras que arriba
estaban el Artist Alley, los videojuegos y los juegos de mesa. Además, contaba
el edificio con numerosos cuartos de baño (6) por lo que así también se
evitaron aglomeraciones.
Abriendo el recinto entró poca gente en un primer
momento, pero se iría llenando después, aunque nunca hasta un punto agobiante gracias
a la magnitud del recinto. Lo primero con lo que me topé fue con el stand del
Pacto de Janas, que además de contar con camisetas conmemorativas del evento,
también ofrecía a los asistentes los libros y comics de los autores invitados,
aprovechando para hacerme con Sandía para
cenar de Javi de Castro.
Una vez hecho esto, me puse a rondar en la zona de los
fanzines, habiendo acudido al evento, entre otros, Morán y Laurielle,
Andergraun y Comikreadores. Aprovechando la ocasión, conseguí el ¡Eh, Tío! de Morán y varias firmas,
tanto en este tebeo como en tomos que ya tenía, como el quinto de Andergraun o La Última Barrera, completándolos con los autores que me faltaban.
A continuación iba a dirigirme a la sesión de firmas
que había de 12:00 – 14:00, pero la organización tuvo problemas aquí: no solo
se cambiaron de sitio (de un aula al pasillo), sino que las retrasaron. Esto se
debió al cambio de recinto, contrastando con la puntualidad y precisión de
ediciones anteriores. Entre que se organizaban las firmas, decidí echar un vistazo
en el piso de arriba. Allí pude echar un ojo al Artist Alley, donde Javier
García Miranda me dedicó el tercer número de la revista Pulp Comics Magazine. También me encontré allí con Aitor I. Eraña,
el cual me comentó que para la versión de Freaks en papel solo le quedaban dos
páginas, siendo ya el resto trabajo de los editores. A su vez hallé en aquel
lugar a Pirot Jere, que al igual que sus compañeros de oficio hacía encargos y vendía merchandising.
Ya resuelto el tema de las Sesiones de Firmas, me
dispuse a asistir a ellas. En este sentido también se notó lo del cambio del
recinto, ya que en anteriores fechas se desplegaba un toldo en la plaza del
Espacio Vías y los autores firmaban bajo él, como si de una feria del libro se
tratase, lo que bien podía ser un reclamo para curiosos que no supiesen que se
estaba celebrando el evento. En fin, allí me topé con Raúl Arnáiz, que me
dedicó su cuarto tomo de Leyendas de
Parva Terra, teniendo mientras con él y con Mari Paz Villar una más que
agradable charla. Otra diferencia con anteriores ediciones es que no estaban
todos los autores al mismo tiempo, dosificándose a lo largo de los tres días
que dura el salón.
Mención especial merecen los cosplayers de Level Up
León 2014, siendo este año, hasta donde yo recuerdo, el año que más disfraces ha
habido, bastante trabajados en su mayoría, engalanando aún más el evento.