La Leyenda de Drizzt, de los Salvatore y Agustín Padilla

(ATENCIÓN: este artículo contiene spoilers sobre la saga de Neverwinter Tales) En la reseña de hoy voy a hablar sobre La Leyenda de Drizzt, un comic que cuenta al guión con R. A. Salvatore (http://rasalvatore.com/) y Geno Salvatore (hijo del anterior) y al dibujo con Agustín Padilla (http://apadillaart.blogspot.com.es/).  

El enano camorrista Pwent ha vuelto de entre los muertos convertido en vampiro. Una atroz sed de sangre le corroe, no saciándole el beber de animales, debido a que debe depredar seres inteligentes. Si bien en un principio le bastará con goblins, a pesar de haberse jurado no alimentarse de enanos, humanos o elfos, la necesidad, la tentación y el ansía cada vez serán mayores. No muy lejos de donde se halla este alma en pena, se encuentran el elfo oscuro Drizzt Do´Urden y la también elfa Dahlia, que una vez apercibidos de la presencia de un no muerto, se apresuran a seguir su rastro, a fin de evitar que haga daño a los inocentes. Poco o nada esperan ambos irse a encontrar con su viejo y fallecido compañero de armas…

Ambientado en el mundo de Neverwinter Tales, de Dungeons and Dragons, el primer punto bueno que tiene este tebeo es que no hace falta haberse leído nada de esta saga literaria para entender el relato, pudiendo incluso decirse que está bien como experiencia introductoria en ella, contando incluso el tomo con un pequeño glosario en la última página con nombres propios para que el nuevo lector se situé un poco. Entrando ya en materia, hay que decir que el tomo plantea una situación compleja para los protagonistas, con un héroe que se ha convertido en un monstruo, siendo difícil en este tipo de casos saber qué hacer, en el sentido de no saber si prima las bondades del pasado o la violencia del presente. Esta dualidad de sentimientos queda muy bien reflejada en la pareja que forman Drizzt y Dahlia, siendo la postura del primero compasiva y esperanzada, pensando que él y su compañera pueden salvar de alguna forma a su antiguo amigo, mientras que la de la elfa es mucho más tajante y expeditiva, pensando que lo que mejor pueden hacer por Pwent y la humanidad es acabar con él. Con todo esto y más, puesto que una situación ya de por si problemática se va a ir complicando más al haber poderes ocultos por detrás, el lector no se aburre en ningún momento, sumándosele a la duda de lo que va a pasar con Pwent escenas llenas de dramatismo y acción.

Respecto al dibujo, Agustín Padilla consigue transmitir muy bien la sensación oscura y siniestra que debe haber en una historia de vampiros, con sombras por doquier y monstruos terroríficos, no solo por Pwent y su armadura de puas, sino también por otros como goblins y demonios, e incluso los héroes de la trama. Acompañando a estos personajes hay fondos muy apropiados para ellos, como oscuras cuevas o tupidos bosques, ayudando también el colorista Leonard O´Grady a meter en ambiente al lector, puesto que el momento del día, ya sea mañana o noche, va a ser bastante importante, puesto que determinará si el vampiro puede cazar o debe descansar. A todo esto hay que añadir una gran expresividad en los rostros y gestos por parte de los personajes de manos del lápiz de Padilla, así como grandes coreografías en los combates.

En conclusión, si os gustan las historias de aventuras y amonstruos, así como historias con un cierto fondo moral y ético, dadle una oportunidad al tebeo de La Leyenda de Drizzt. Os podéis hacer con esta obra de manos de Norma Editorial por un precio de 14€, con un total de 136 páginas, donde además de la historia en sí, vienen varios extras, como las portadas que aparecían en cada uno de los números de la colección recopilada en este integral, así como un escenario de rol del juego Dungeons and Dragons (o Dragones y Mazmoras, vaya).

Por último, la dedicatoria que me hizo el amable Agustín Padilla en el tomo durante el Expocomic 2013 de Madrid. ¡Gracias de nuevo!